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Fundas para sombrillas: la guía

¿Por qué usar una funda para sombrilla?

Hacer sombra del sol no es una tarea fácil. Que se lo digan a tu sombrilla. Y es que ese es el principal uso de una funda de sombrilla, proteger a este mueble de jardín del desgaste que supone estar todo el día a la intemperie.

Una funda de sombrilla también tiene la función de alargar la vida útil de tu parasol, ya que suelen ser accesorios muy caros que queremos que duren bastante en el tiempo.

También sirve para hacer que la sombrilla esté bien recogida, porque muchas veces el viento puede llegar a abrir la sombrilla por casualidad, provocándole daños que a la larga se vuelven irreparables.

Pero la funda de sombrilla también es un elemento de decoración, ya que le dará un toque mucho más elegante a tu jardín que si tenemos la sombrilla a medio abrir.

¿Cómo elegir una funda para sombrilla?

Para elegir nuestra funda de sombrilla debemos de tener muchos parámetros en cuenta, puesto que no es una decisión que podamos tomar al azar.

Empezando por el tamaño de la funda, ya que debe encajar perfectamente con el de tu sombrilla. Si se queda corta, puede que tu sombrilla quede desprotegida en algunas partes, mientras que si es muy larga la sombrilla bailará dentro de la funda.

Que sea impermeable también es importante, pues, si la tela de la sombrilla se moja, se puede pudrir y desgastar mucho más rápido.

Y por eso también es relevante que la funda de sombrilla proporcione un ventilado al parasol, para que no retenga la humedad en su interior.

El material en el que esté fabricada la funda de sombrilla también es fundamental. Una de tela puede ser efectiva si solamente queremos tapar la sombrilla de los rayos del sol, mientras que si hay otras condiciones climatológicas como nieve, lluvia o viento, una funda de sombrilla de plástico será mucho más útil.

El color de la funda también debe ser un elemento crucial, y debe ir a juego con la gama que usos en tu conjunto de muebles de jardín.

También debemos tener en cuenta el estilo de la funda de sombrilla, para que no desentone en nuestra terraza, patio o jardín.

¿Cómo cuidar una funda para sombrilla?

Una funda de sombrilla es un elemento que está a prueba de la intemperie, ya que su función es la de proteger otro mueble de tu jardín. Sin embargo, esto no significa que no conlleve unos cuidados, aunque sean escasos.

En primer lugar, de vez en cuando deberemos limpiar nuestra funda de jardín. Si es de plástico, puede que con pasarle un paño sea suficiente. En cambio, si es de tela, puede que podamos meterla a la lavadora si las recomendaciones del fabricante lo permiten.

El mejor momento para hacerle este mantenimiento a nuestra funda es cuando también se lo vayamos a hacer a nuestra sombrilla de patio. Aprovecharemos la ocasión para dejar limpios y relucientes estos dos elementos de nuestro jardín.

Por último, puede que algunas fundas de patio necesiten de ciertos líquidos para volver a recuperar su color original. Aun así, no te preocupes, ya que sustituir una funda de sombrilla suele ser bastante sencillo.

La importancia de una buena funda de sombrilla

Con la facilidad para comprar una sombrilla que existe hoy en día, hay un accesorio que nos viene de perlas para poder protegerla de las condiciones climatológicas, que es la funda de sombrilla.

La sombrilla es uno de esos elementos que no puede faltar entre tus muebles de jardín. Principalmente, porque es la mejor aliada contra el sol, algo que querremos evitar en esos días calurosos en los que no sabemos dónde meternos.

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Además, este accesorio puede usarse indiscriminadamente en muchas zonas de tu patio, jardín o terraza.

Tener un paraguas al aire libre en un solárium es perfecto para tener una protección UV cuando ya estamos a punto de quemarnos.

O también puede servir para proteger tu mesa de comedor exterior y proteger de la intensa luz asolar a tus invitados.

Normalmente, este elemento viene con una losa para sombrilla, unos pies de sombrilla o podemos clavarla directamente en la tierra o el césped si tenemos.

Independientemente de los elementos que tengamos, lo importante es poder protegerlos todos, y para ello nada mejor que una funda de sombrilla.

Existen muchas maneras de hacer una funda de sombrilla. Un claro ejemplo es que podemos utilizar la tela de un edredón viejo para hacer una funda de sombrilla. O emplear las fundas de muebles de la casa que no usemos para tapar nuestra sombrilla. Los toldos o, incluso, los tapetes, son otra buena opción para fabricar una funda de sombrilla.

Pero hoy queremos que conozcas por qué debes comprar una funda de sombrilla, conociendo el porqué, el cómo y el mantenimiento de este elemento tan indispensable para cuidar nuestro sombrilla recta, sombrilla con luces led, o parasol excentrico.